-?
El justicialismo de Río Negro, o por lo menos la conducción del partido, ha iniciado en estos últimos días el trabajo de preparación para encarar las elecciones legislativas del año que viene.
Primero reunió a su consejo partidario en Villa Regina, en donde se definió convocar al congreso de la agrupación para el 15 de octubre y de paso celebrar, todos los que estén, el Día de la Lealtad.
Al día siguiente, rumbearon al Valle Medio para reunirse y festejar los nueve años de gobierno municipal en Lamarque, acto al que convocó el intendente de la capital del tomate, Sergio Hernández. Estuvieron el presidente del partido, Martín Soria, el diputado nacional Martín Doñate, y los intendentes de Choele, Beltrán y Pomona, además del anfitrión.
Y finalmente, el jueves pasado, el titular del partido viajó a Viedma para encabezar una reunión en el bloque de legisladores del Frente para la Victoria, donde se acordaron estrategias políticas y parlamentarias en este último tramo del año. Luego, compartieron un acto en la unidad básica de la capital de la provincia.
La reunión con el bloque duró casi dos horas, y oficialmente se supo que hubo tiempo para desarrollar un análisis de la política nacional y provincial. También, para avanzar en la unificación de criterios sobre el posicionamiento de la bancada opositora respecto de temas como la licitación del agente financiero de la provincia, el costo de las tarifas y la inseguridad, entre otros.
Soria llegó acompañado por su hermano Carlos y por Juan Manuel Pichetto. Lo esperaban la diputada nacional Silvia Horne, la ex intendenta de Bariloche María Eugenia Martini, y todos los legisladores del bloque.
Terminada la reunión, Soria brindó algunos detalles y dijo que "a pesar de que algunos habían sembrado que había legisladores que no iban a ir, que estábamos peleados, lo cierto es que no faltó ni uno. Estuvimos en un clima de unidad analizando la acción política y el criterio a seguir".
Agregó que no se había hablado de una postura unificada sobre una eventual reforma de la Constitución Provincial, y dijo que “en todo caso hay otras urgencias en Río Negro” y que, en caso de impulsar tal reforma, sería “el último error político” de Weretilneck.
En sus declaraciones, el titular partidario y además intendente de Roca pareció también haber dejado abierta alguna posibilidad de que así como hay negociaciones para una eventual unificación del Partido Justicialista con el Frente Renovador de Sergio Massa a nivel nacional, también pueda haberlas en la provincia, al afirmar que “acá ellos no van a jugar a perdedor”.
Dijo que “no está en discusión” la candidatura de su hermana María Emilia para las legislativas
Ahora bien, es cierto que no se escucharon voces disonantes por lo menos hasta este momento, pero hay ciertos indicios de que el camino no está tan allanado para las pretensiones del presidente del partido.
En esa reunión del bloque, incluso, había hombres y mujeres de distintas extracciones internas, diferentes trayectorias y modos de vivir y de pensar el quehacer de la política que no compatibilizan exactamente con las de los Soria.
Del total de los 17 legisladores, solo se pueden contar como alineados sin chistar a Rochás, Albrieu, Bisotto, y Ramos Mejía, pero el resto como Marinao o Rivero tienen mucha identificación con el senador Pichetto, y otros como Sabatella que por ahora están en una posición neutral.
Una situación que con menores o mayores demostraciones de odios y amores se replica en lo que queda del peronismo a lo largo y ancho de la provincia.
Y es sabido que Pichetto tiene formas de accionar totalmente diferentes a los Soria y que incluso, tras la asunción de Macri ha dado claras muestras de estar convencido de la necesidad de oposición responsable, acuerdos consensuados, y garantías de viabilidad y gobernabilidad del país.
Y de manera similar mantiene institucionalmente su relación con el gobernador Weretilneck.
El legislador Rivero ha expresado públicamente que "el grupo de amigos, afiliados y dirigentes ligados y comprometidos con el senador Pichetto por años de militancia, tiene existencia concreta y forma parte de un proyecto político que debe reconsiderarse, ante las nuevas circunstancias, generar nuevos liderazgos y convertirse en importante protagonista en el escenario del peronismo”.
Seguramente la idea de Soria es tratar de reunificar lo más que se pueda ese bloque y alinearlos debajo de la conducción de los órganos partidarios.
Lo cierto es que ese bloque no se puede permitir el lujo de nuevas escisiones entre sus integrantes. Hay que recordar que era una bancada de 30 legisladores, o sea con mayoría en la Cámara y su división es lo peor que le pudo pasar a la conducción del PJ y lo mejor que le pudo pasar al partido gobernante.
Y como decíamos antes, esas divisiones no se circunscriben al parlamento, sino que producen un efecto dominó que lo único que logra es debilitamiento electoral.
De todas formas habrá que esperar el desarrollo del Congreso del 15 del mes que viene para tener un panorama más claro de la pretendida unidad del peronismo, pero hay indicios de que no todos están de acuerdo con las intenciones y acciones de Soria y se habla de alguna “mayoría silenciosa” que en algún momento irrumpiría en el horizonte.
Con seguridad lo hará antes del 2019, pero aún hay dudas de sus decisiones para las elecciones de medio término.
Va con firma | 2016 | Todos los derechos reservados
Director: Héctor Mauriño |
Neuquén, Argentina |Propiedad Intelectual: En trámite