-?
30 de diciembre de 2015. El jefe de gabinete Marcos Peña anuncia en conferencia de prensa que el Poder Ejecutivo reformará por Decreto de Necesidad y Urgencia la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (LSCA). Completa la idea diciendo que a partir de ese momento, “por decisión del presidente Macri, se termina la guerra del Estado contra el periodismo” que -aclara- habría comenzado siete años antes por decisión de Cristina Fernández de Kirchner y en la que esa ley habría sido el arma privilegiada. Fin de la entrada en el diario.
4 de enero de 2016. El boletín oficial publica el DNU 267/2015 que modifica la LSCA , supuestamente firmado por Mauricio Macri el día que se encontraba descansando en Villa La Angostura. Entre otros puntos deroga los límites a la transferencia y extiende los plazos de las licencias, establece prórrogas automáticas, flexibiliza las medidas anti concentración, deroga las obligaciones de las televisoras de cable respecto de los canales abiertos locales y la grilla de programación, crea el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM), en reemplazo de las Autoridades Federales AFSCA y AFTIC, elimina garantías básicas para su autonomía e independencia, y disuelve el Consejo Federal de Comunicación Audiovisual dejando sin participación en la definición de las políticas a las provincias, los diversos sectores académicos, los medios de distinto tipo y los trabajadores. Fin de la entrada en el diario.
3 de marzo de 2016. El Congreso Nacional de la Coalición por una Comunicación Democrática (Coalición) aprueba los Nuevos 21 Puntos como una plataforma para “defender lo conquistado y reclamar por lo que falta para garantizar el pluralismo y la comunicación democrática en todos los soportes”. Entre ellos, el punto 20 afirma que “...la no concentración y la producción de equipamiento y contenidos locales, propios y nacionales, constituyen una vía directa para el desarrollo de una industria tecnológica nacional y para la promoción del trabajo en todas las áreas (...). El sostenimiento y desarrollo de una industria nacional de contenidos audiovisuales, conjuntamente con las cuotas de pantalla para la producción de ficción cinematográfica y audiovisual deben ser políticas de estado y estar promovidos por ley”. Fin de la entrada en el diario.
8 de abril de 2016. En la Audiencia convocada en Washington por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) bajo el título “Derecho a la libertad de expresión y cambios a la LSCA en Argentina” representantes del gobierno nacional se enfrentan a la Coalición y el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) queienes denuncian que las reformas a favor del mercado tienen efectos reales y cotidianos que afectan regresivamente la distribución de la palabra. Los representantes de medios cooperativos y PyMes son enfáticos en la imposibilidad de competir y subsistir en mercados concentrados y piden que “no se los abandone” a la concentración feroz del mercado. Fin de la entrada en el diario.
4 de mayo de 2016. El espacio Interredes, conformado por redes de medios de comunicación (FARCO - AMARC - Red Colmena/CNCT - RNMA - Canales Urbana, Barricada y Pares TV) reclama la ejecución de los Fondos de Fomento Concursable (FOMECA) adeudados y una actualización acorde a la inflación “es un 30, 40% menos de poder adquisitivo”. Fin de la entrada en el diario.
9 de mayo de 2016. FM Fribuay, una radio comunitaria del oeste del Gran Buenos Aires denuncia el “apagón forzado” que los hace apagar la radio desde las 0 a las 6 de la mañana. La decisión tiene que ver con el tarifazo de la electricidad “...que se suma a la cancelación de pautas municipales y congelamiento de los programas de fomento a la gestión de los medios comunitarios. Como agravante, se registra un pronunciado descenso en la recepción de la publicidad privada, relacionado con la dura actualidad económica que enfrentan las Pyme y los comercios locales…”. Fin de la entrada en el diario.
12 de mayo de 2016. La Mesa Multisectorial por el Trabajo, la Ficción y la Industria Nacional Audiovisual, integrada por las organizaciones más representativas del sector, denuncia la grave crisis que deben afrontar debido a que el Poder Ejecutivo no considera “la importancia de las industrias audiovisuales y la presencia de contenidos nacionales, especialmente los de ficción, y al trabajo Argentino en los medios de comunicación…”. En sus palabras, “la situación crítica que atraviesa la industria audiovisual en TV no tiene precedentes en la Argentina”. Fin de la entrada en el diario.
16 de mayo de 2016. Solo en la Ciudad de Buenos Aires y Córdoba, en los últimos 6 meses son más de 2500 los trabajadores de la comunicación afectados por despidos masivos y arbitrarios, precarización, cierre de empresas y persecución sindical e ideológica. El relevamiento fue realizado por especialistas de la Carrera de Comunicación Social de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires junto con sindicatos y organizaciones gremiales. Fin de la entrada en el diario.
18 de mayo de 2016. La Defensoría del Público de los Servicios de Comunicación Audiovisual pide a diputadas y diputados que integran la Comisión de Libertad de Expresión “medidas urgentes y efectivas contra los despidos masivos y arbitrarios a trabajadores y trabajadoras de los servicios de comunicación audiovisual”. Fin de la entrada en el diario.
20 de mayo de 2016. El representante de Radio Nacional Neuquén en la Audiencia Pública realizada por la Defensoría denuncia que las nuevas autoridades de la radio “impusieron contenidos, todo fue acompañado por maltrato. Ellos piensan que la información se compra y se vende. Hay un mensaje mentiroso y cínico respecto de la amplitud y tolerancia, no se cumple. Se practica lo contrario desde esta conducción de este medio público. A ellos no les interesa que haya medios públicos por fuera de Buenos Aires". Fin de la entrada en el diario.
La Posguerra
Podemos afirmar sin temor a equivocarnos que “el fin de la guerra” declarado unilateralmente por el gobierno de Cambiemos afectó directamente al sector audiovisual.
Como muestra de la situación que se vivía hasta el cambio de políticas veamos el informe de la UNESCO de 2015 en el que destaca como un caso paradigmático que en nuestro país la LSCA “permitió hacer progresar los contenidos locales en los canales del país en un 28%” desde 2009. Y tenemos claro que más contenidos locales significan más puestos de trabajo directos e indirectos en cada región, en cada ciudad.
Haber eliminado las políticas públicas de fomento y el financiamiento de la producción nacional de contenidos tendrá necesariamente impacto local y en las regiones. No será neutro para un sector que apenas un lustro atrás comenzó a ordenarse. Producto de años de desidia y malas regulaciones es que el ecosistema del sector reconoce múltiples formatos laborales, lo que a su vez dificulta el seguimiento de las consecuencias de la política de Macri.
En este contexto las consecuencias visibles del cambio se observan primero en el decrecimiento de la actividad económica, en la concentración del mapa de medios y la cadena de valor audiovisual, donde hay medios y productoras emergentes que necesitaban todavía de un tiempo de incubación antes de salir a la competencia en el mercado.
Comenzaremos a ver mayor concentración en la industria, con grandes empresas que engordan a costa de las pequeñas que adelgazan. Baja de los concursos para canales de TV abiertos. Regreso del fútbol de alto rating a pantallas privadas, y por ende, a la vieja modalidad de pagar el cable para ver el fútbol. Y -para seguir con las metáforas bélicas- la amenaza de desembarco de grandes tanques de la comunicación transnacional y las grandes plataformas de contenidos por internet.
Ya es público el cierre de programas de financiación de contenidos vinculados a la TDA, pero nada se sabe sobre el proyecto oficial para Encuentro, Paka Paka y los otros canales públicos de la TDA. Los canales universitarios y de pueblos originarios ya no tienen asegurado un lugar en la grilla de la TV Paga.
No obstante hay cosas que no se ven pero que también comenzarán a sentirse. Se trata de poner el radar para detectar en qué medida el fin de la guerra decidido por Mauricio Macri afecta los derechos de la ciudadanía a la información diversa y plural, a la libertad de decir y recibir información. Llevamos casi 150 días de un decreto que los funcionarios del gobierno nacional definieron como transitorio, pero cuyos efectos se amplifican cada día que pasa.
Va con firma | 2016 | Todos los derechos reservados
Director: Héctor Mauriño |
Neuquén, Argentina |Propiedad Intelectual: En trámite