-?
Militante de La Cámpora, sostiene que “la única conductora y líder” sigue siendo la ex presidenta Cristina Kirchner, aunque no le pide que sea candidata. Pese a la demonización que hacen los medios hegemónicos de su organización, asegura que el trato de sus pares de la Cámara “es cordial, muy respetuoso”.
Ayelén asegura que las denuncias contra Cristina “son falsas, son operaciones para justificar las políticas neoliberales que aplica este gobierno”. De Omar Gutiérrez, el gobernador con quien comparte el apellido aunque no lazos familiares, dice que “dio un giro de 180 grados, porque antes apoyaban a Scioli” y ahora es uno de los mandatarios provinciales “cercanos a Macri”, cuando en realidad “la gente en Neuquén votó al kirchnerismo”.
-¿Cómo han sido estos meses como diputada?
Estos ocho meses han sido complejos, es raro, porque La Cámpora es una organización que milita mucho la calle. Estoy acá en representación de una organización que creo que es representativa del kirchnerismo, tenemos una mirada que responde al proyecto nacional de Cristina. Trabajar acá en Legislatura se ha hecho difícil, y desde dos lugares: desde lo personal, porque vengo de una militancia que es estrictamente territorial en el Norte neuquino, y llegar acá a veces pareciera que es como encerrarse en una caja de zapatos. Pero por otro lado, acá uno se encuentra con diferencias políticas que no permiten que se debatan temas sustanciales para la sociedad, entonces estamos a veces muy acotados en los temas que podemos tratar.
-¿Siendo una diputada que proviene de La Cámpora, cómo es el trato que recibís de tus pares?
Todos los diputados nos tratamos con muchísimo respeto, con igualdad, con equidad, no estamos siempre agrediéndonos ni es una disputa de pasillos ni permanente. Los debates los damos en la Cámara, por ahí también en los medios de comunicación, expresando un posicionamiento político que obviamente es contrario, pero el trato es cordial. En la Cámara se suelen dar debates duros, pero no me ha tocado por el momento sufrir ahí una situación dirigida específicamente a la organización. La organización está muy demonizada a nivel mediático, pero acá por lo menos en Legislatura no se me ha acusado desde ese lugar, desde esa pertenencia política.
-El efecto la demonización mediática que hay para La Cámpora, ¿se siente en la calle?
Más o menos. En realidad te encontrás con los dos puntos de vista. Nos ha pasado de que viene gente a nosotros y sí: nos dicen 'ustedes son los choriplaneros, los vagos', todas las acusaciones habidas y por haber. Pero también hay mucha gente que ve el trabajo territorial que se hace, y ve que nosotros vamos a un lugar, ayudamos como podemos y no nos importa de qué expresión política venga. Hace poco una compañera de La Cámpora en Centenario festejó el Día del Niño. Nosotros fuimos, nos acercamos y hubo mucha gente agradecida, y gente que no pertenece a nuestro espacio político, y sin embargo ven eso también. Quiero decir también que el contacto con la gente, directo, hace que la mirada muchas veces cambie. Lo que pasa es que el peso mediático es enorme, pero nosotros eso lo contrarrestamos con militancia y con presencia en los lugares donde hay que estar.
No podemos exigirle a Cristina que sea eternamente nuestra candidata
-¿Cómo está La Cámpora ahora que ya no son gobierno? Antes decían que eran todos funcionarios, o que militaban por un puesto de trabajo en el Estado. ¿Siguen militando?
Sí, claro. Yo trabajaba como docente, los compañeros seguimos militando, seguimos trabajando desde el lugar que nos toca y que el proyecto que defendemos nos demanda. A mí hoy me toca desde este lugar, a otros compañeros en un barrio. Por supuesto nosotros hacemos una crítica, hacemos un análisis de muchas cosas que creemos tendríamos que modificar, y hay una reestructuración también de la organización en términos de cómo actuamos y cómo militamos políticamente. Porque entendemos que si teníamos un montón de fundamentos y argumentos para ganar y defender un modelo de país y no pudimos lograrlo, quizás hay que usar otras estrategias, hay que apelar a otras herramientas de comunicación de llegar a la sociedad para que se transmitan derechos y lo que nosotros queremos para este país. El cambio de gobierno en ese sentido fue brutal, hoy cada día vemos la realidad argentina y también la realidad neuquina, que lentamente se está viendo afectada. No estamos mejor que hace ocho meses atrás, entonces también entendemos que si la gente no nos dio su voto, no nos acompañó como proyecto político, hay algo que nosotros tenemos que rever para poder volver y para poder volver mejores.
-¿Hay más necesidades ahora?
Hay muchísima necesidad. Acá en Neuquén capital sin ir más lejos, se han abierto muchísimos comedores. Hace poco estuvimos en un jardín maternal, un comedor donde nos comentaban que han aumentado la cantidad de chicos que asisten a comer ahí, cómo la realidad de las familias se está modificando. Nosotros tenemos que estar ahí, es nuestra responsabilidad militante, es además la responsabilidad que asumimos. Tenemos un compromiso social que es el de buscar una sociedad más justa, más equitativa, más solidaria. Entonces vamos por ello, buscamos eso también, marcando la presencia en las calles, la presencia en los barrios, manifestándonos, acompañando una manifestación, acompañando a los trabajadores que entendemos muchas veces tampoco están representados por la dirigencia sindical. Creo que hay mucho quiebre en lo que son las representaciones, que también es necesario reevaluar, rever y empezar a trabajar por la incorporación de nuevas ideas, una idea más frentista, no cerrada. No es que nosotros pretendemos que todos sean kirchneristas, nosotros pretendemos que haya una sociedad más justa y en eso no importan las expresiones políticas. Por eso trabajamos e intentamos proponer una idea más integradora. Yo creo que cuando Cristina dijo esto del Frente Ciudadano y de pensar '¿vos estabas mejor antes del 10 de diciembre que ahora?'. Es esa la pregunta que hay que hacerse y es eso en lo que uno tiene que trabajar como organización.
-¿Cómo vivís las denuncias en contra de Cristina Kirchner y los casos de corrupción del gobierno anterior?
Tenemos muy claro que esos son ataques, son operaciones mediáticas, tenemos muy en claro que las cosas de las que acusan a nuestra presidenta son falsas, y que pretenden hacer una demonización de todo lo que fue la gestión anterior para intentar justificar lo que están haciendo ahora: un proyecto neoliberal funcionando para unos pocos y que está dejando medio mundo en la calle y sin trabajo, y con comercios que se cierran todos los días. Tenemos muy en claro que no vamos a justificar a nadie que no tenga que justificarse. Cada persona que haya realizado un hecho de corrupción nosotros queremos que caiga todo el peso de la ley sobre ellos. Yo no voy a venir a justificar a un tipo como (el ex secretario de Obras Públicas, José) López y tampoco soy López. Si ese hombre tiene que ir a prisión que vaya. Pero nosotros no somos eso, mis compañeros de militancia no son eso, y no nos vamos a hacer cargo de la corrupción de una persona en particular, o de varias. Al contrario, mejor si se da un proceso de justicia y que sobre esas personas caiga todo el peso de la ley.
Los limites los tengo muy claros. Con Massa no, con Macri tampoco.
-¿Cristina sigue siendo la conductora del espacio político que integrás?
Nuestra única conductora es Cristina, nuestra única líder, referente política, es Cristina. Jamás ponemos en discusión que ella es la máxima expresión de este proyecto. Entiendo que hay muchos sectores que hoy, como ella no es presidenta, tal vez le genere dudas por no ocupar un cargo político, pero ella en sí misma es una líder natural. Es la líder natural del FpV. Nosotros no lo ponemos en duda, ella sigue siendo nuestra única líder política.
-¿Cristina tiene que ser candidata?
Le hemos pedido muchas cosas a Cristina, y ella nos ha dejado una vida entera. Además, nuestra responsabilidad es generar los cuadros políticos para que haya otras referencias. Lo que ella decida nosotros lo vamos a aceptar porque nos ha dado muchísimo. No estamos tampoco esperando que ella sea la candidata ni poniendo exigencias, porque ella plantea un liderazgo y esas definiciones se van a ir dando en las coyunturas políticas de cada lugar.
-Si ella no es candidata, ¿quién lo será?
El candidato es el proyecto. Tenemos que plantear un proyecto político independientemente de la figuras, porque eso se va a decantar a partir de que sea una figura representativa de ese proyecto. No podemos exigirle a Cristina que sea eternamente nuestra candidata por ser nuestra mayor referente política. Van a haber otras referencias políticas del FpV, y esas personas expresarán el proyecto iniciado por Néstor y continuado por Cristina. Nosotros vamos a apoyar a esa persona, porque insisto: el candidato es el proyecto.
-¿Qué figuras aparecen en el Frente para la Victoria?
Tenemos referentes políticos enormes, como Máximo (Kirchner), el 'Cuervo' (Larroque), Axel Kicillof, Mariano Recalde... Hay un montón de espacios políticos que conforman el FpV y que creemos son líderes excepcionales y no pueden faltar dentro de un armado político. Está Martín Sabbatella, hay muchos espacios que pueden expresar al kirchnerismo en su conjunto, y sobre todo en una mirada más amplia y más frentista.
-¿Cómo lo ves al gobernador Gutiérrez, que tiene muy buena relación con el presidente Macri?
El gobernador tomó un posicionamiento político y la sociedad neuquina también expresó un voto, porque en la provincia ganó Scioli. Me parece que estos cambios en los acompañamientos o en las miradas políticas generan confusiones en la sociedad, generan incertidumbre también. Es un gobernador que está acompañando de cerca las políticas de Macri, y claramente eso a nosotros nos ubica en un lugar de oposición. Y se hace difícil, uno no entiende en realidad estos cambios por parte del partido provincial. Es un cambio rotundo, un cambio radical, son 180 grados de una mirada. Entonces, pasar de Scioli a Macri… y bueno, esas son cosas que las tendrán que explicar ellos.
Rioseco fue nuestro candidato y yo lo considero un compañero del FpV
-¿Cómo está hoy la zona norte de la provincia?
Como nativa de Chos Malal, la zona norte es la más abandonada de Neuquén. Estar allá es hacer un retroceso de un montón de años, porque se ha relegado esa zona. Creo que tiene que ver con varias cuestiones, por ejemplo con la imposibilidad de que Neuquén tenga una matriz productiva diversificada. Eso hace que haya zonas totalmente relegadas de la explotación económica. No podemos estar dependiendo solamente de la renta petrolera, necesitamos generar otra matriz productiva para que estas zonas no queden al margen del desarrollo económico. La mayoría de las rutas del Norte neuquino no están asfaltadas, no tenemos conectividad. Estamos en una provincia productora de gas y sin embargo en el Norte todavía tenemos escuelas que funcionan con zepelín. Se han hecho también obras, se hizo una costanera hermosa en Chos Malal, se ha hecho en Andacollo, pero la mayoría durante la gestión de Cristina con el Programa Más Cerca. Nosotros para ir a Chos Malal desde la capital tenemos que pasar necesariamente por Zapala, teniendo una ruta más directa pero que no está en condiciones. Creo que nos quedamos en intenciones de mejorar pero no terminamos nunca de mejorar los servicios y la situación de las localidades del Norte. Estamos muy aislados también en materia de salud, nosotros para hacer estudios de alta complejidad necesitamos sí o sí llegar a Neuquén capital. No tenemos fuentes de trabajo que excedan la relación con el Estado y en estas condiciones que estamos viviendo hoy, se hace cada vez más difícil generarlas.
-¿Qué debería pasar con el FpV en la provincia?
Soy de los que creen que hay que ir por una visión más frentista, mas horizontal, en donde todos y todas, de los que nos consideramos kirchneristas, que formamos parte de este proyecto político que se inició con Néstor y siguió con Cristina, tendríamos que poder aunar voluntades e ir todos juntos en una misma expresión política. Porque insisto, Neuquén votó al kirchnerismo. También a nivel provincial hay expresiones políticas diversas, de manera que deberíamos lograr congregarnos en una expresión representativa de todas esas voluntades y poder acercarnos a una candidatura que represente esa unión. Voy por una idea frentista, y todos aquellos que pretendan ser candidatos por este espacio bienvenidos sean.
-¿Cuál sería el límite para ese frente electoral?
Los limites, por lo menos los míos, los tengo muy claros. Con Massa no, con Macri tampoco. Son mis límites, en eso soy clara.
-¿Y en la provincia?
Acá la representación del Pro es Pechi Quiroga en este momento, y de Massa tenemos diputados que están en esos lugares, y nosotros desde La Cámpora sentimos que esos son nuestros límites.
-Rioseco plantea un frente en el que esté Horacio Quiroga. ¿Qué dicen ustedes?
Rioseco fue nuestro candidato y yo lo considero un compañero del FpV. Él tiene su estrategia política, yo lo respeto, pero se hace complicado pensar en una alianza de esas características. Considero a Rioseco un compañero del FpV que realmente creo que sería posible que esté dentro de un armado dentro de un frente, me refiero al FpV.
-¿Pero sin Quiroga?
Con Quiroga, una persona que es del Pro, y que además, ha catalogado a los kirchneristas de un montón de adjetivos peyorativos, la verdad no encuentro espacios de coincidencia.
Va con firma | 2016 | Todos los derechos reservados
Director: Héctor Mauriño |
Neuquén, Argentina |Propiedad Intelectual: En trámite