"Estamos acá juntos ratificando que no hay trabajadores de primera y trabajadores de segunda. Acá no hay enfrentamiento entre formalidad e informalidad porque todos queremos que más allá de la relación laboral que se establezca que sea con trabajo digno y con derechos", dijo Héctor Daer, uno de los cotitulares de la CGT al abrir el acto de asunción de las autoridades de la CTEP, ratificando el anhelo que se planteó desde el inicio de las agrupaciones de trabajadores de la economía popular de ser tomados en cuenta como parte activa del movimiento obrero.

El secretario general electo, Alejandro "Peluca" Gramajo, y las nuevas autoridades de la lista de unidad denominada Celeste y Blanca por Tierra Techo y Trabajo, Dina Sánchez y Norma Morales como secretarias adjuntas, Johana Duarte, secretaria gremial y Ramiro “Vasco” Berdesegar, secretario de organización, fueron acompañados en el acto por los dirigentes de la CGT y CTA, Pablo Moyano, Héctor Daer, Hugo Yasky y Hugo Godoy, además de Esteban "Gringo" Castro como secretario saliente.

La importancia del lugar elegido para el acto es relevante, tanto que los medios afines a las políticas antipopulares prontamente hablaron de una “postal amenazante” para enfrentar al gobierno entrante. Todos los discursos, desde los de los representantes de las centrales obreras como los de los miembros de la UTEP, reforzaron, con más o menos énfasis, la idea de la necesidad de un movimiento obrero unido donde no haya diferencia entre trabajadores formales y de la economía popular.

Un espíritu religioso atraviesa en forma relevante algunos sectores de las organizaciones ligadas a la UTEP y el 8 de diciembre varios de ellos se movilizaron a Luján en el Día de la Virgen. Esteban “Gringo” Castro, secretario saliente de la UTEP, que en el acto en la CGT declaró estar emocionado de compartir esa reunión en un lugar sagrado para el pueblo como el Salón Felipe Vallese y en su escala de creencias dice tener a Dios, la Virgen Maria y la unión de la clase trabajadora, expresa en Luján: “el pueblo no separa la fe de la lucha como no separa la fe de la vida. El cristianismo popular tiene sus vaivenes históricos y hay una intencionalidad de separar esos dos elementos, la fe y la política. En momentos como estos, hablando en términos espirituales, la derecha intenta generar un espíritu forjado en el individualismo y nosotros por el contrario intentamos construir un espíritu común”.

Alejandro Gramajo decía el 8 de diciembre en Luján, adonde llegaron caminando desde General Rodríguez: “hay que ver cómo se desarrolla el Gobierno. Hay anuncios que van en contra de los derechos laborales y sociales y no podemos retroceder en los derechos que hemos conquistado. Durante el gobierno de Macri en 2018 logramos impulsar la Ley de Emergencia Social que se votó por absoluta mayoría, salvo el voto en contra del diputado Olmedo y dimos pasos importantes para que se reconozca a los trabajadores de la economía popular que se inventan su trabajo, como un nuevo actor social que tiene que ser reconocido como trabajador y avanzar hacia una institucionalización que se da en principio con la creación del Salario Social Complementario que es un aporte a las y los trabajadores que están fuera del sistema formal y participan en actividades productivas sociocomunitarias. Realizamos el Registro de Barrios Populares que sirvió para resolver muchos de los problemas concretos de varios millones de personas. No queremos retroceder en los derechos conquistados, vamos a ser respetuosos, esperar que asuman y escuchar sus propuestas para los 46 millones de argentinos, y ahí evaluaremos y agotaremos todas las instancias de diálogo como lo hemos hecho con todos los gobiernos.”

“Tenemos que preguntarnos porque volvimos a perder el Gobierno. Tuvimos una expectativa muy alta en 2019 que no se cumplió. El Gobierno no vio o no entendió las demandas de los sectores populares. Tenemos que tener un debate serio y honesto política e intelectualmente sin apuntar con el dedo buscando culpables. Tenemos la obligación de construir una alternativa política que enamore al pueblo y exprese el proyecto de la militancia y los distintos sectores sociales, juveniles, estudiantiles, el movimiento de mujeres que ha sido absolutamente protagonista los últimos tiempos."

"Los que venimos del peronismo creemos que la sociedad argentina se transformó profundamente cuando Perón decidió darle mucho poder a los trabajadores y tenemos que recuperar eso. Hay un cambio de ciclo y tenemos que estar unidos. Desde que se inició la CTEP venimos reafirmando una línea de construcción histórica que es la unidad de los trabajadores independientemente de donde estén encuadrados, CGT, CTA o UTEP.

Haber hecho nuestra asunción en el Salón Felipe Vallese de la CGT es un hecho histórico, porque además de hablar de la unidad del movimiento obrero estamos hablando del hecho inédito del reconocimiento a un sindicato de nuevo tipo como es la UTEP”, define Alejandro.