El ministro de Energía, Juan José Aranguren, tiene la intención de ofrecer el manejo de la Planta Industrial de Agua Pesada (PIAP) ubicada en Arroyito a YPF, para que se encargue de producir las 300 toneladas de stock para la vida útil de las centrales nucleares de la Argentina. A cambio, la empresa nacionalizada podrá desarrollar allí una planta de fertilizantes.

La revelación sobre la posibilidad de un canje surgió de una reunión mantenida entre el funcionario y el diputado nacional de Unidad Ciudadana Darío Martínez, quien concurrió al encuentro en el sexto piso del edificio ministerial junto al dirigente de la CTA Fernando Lisse,trabajador de la planta y ex coordinador entre los trabajadores de la PIAP y la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA). Los neuquinos fueron a solicitarle al ministro la inmediata puesta en marcha de la planta, a fin de poner en producción las ya famosas 300 toneladas que necesitan las centrales nucleares argentinas para funcionar

Mientras tanto los trabajadores de la PIAP aún no saben cuándo ni cómo cobraran sus sueldos del mes de junio.

Lisse reveló a que, si bien acaban de cobrar los sueldos de mes de mayo, “aún no hay partidas para los sueldos de junio”. Los datos los obtuvo “leyendo el presupuesto del Estado Nacional, donde están las partidas de la CNEA, no tienen partidas para nosotros. Hubo un acuerdo entre la CNEA y el ministerio de Energía y se destinaron 106 millones, con eso se pagaron los haberes hasta mayo”, indicó.

El dirigente gremial afirmó que la provincia de Neuquén “se comprometió a pagar una deuda de 60 millones de pesos que tiene con la Empresa Neuquina de Servicios de Ingeniería (ENSI), que controla la planta actualmente. El acuerdo consta de seis pagos mensuales de 10 millones, pero ya vamos por el cuarto mes y sólo pagó dos cuotas. Y estamos hablando sólo del pago de la deuda, porque la ENSI sigue prestando el servicio y no se está pagando, con lo cual la acreencia debe ser mayor”.

La de Arroyito es la planta de producción de agua pesada más grande del mundo. El precio actual de la tonelada que sale de Neuquén es de alrededor de U$S 800. Desde el gobierno nacional presionan para reducir ese precio en un 30%, con la excusa de que si no lo hacen, importarán el producto.

La paradoja es que si la PIAP continúa sin producir, subirá el precio de lo que viene de afuera, ya que ese valor depende de la oferta y la demanda. “Cuando deja de producir Arroyito, el precio del agua pesada aumenta a nivel mundial, así que Aranguren miente cuando dice que va a ahorrar dinero, es lo mismo que pasa con la producción petrolera a nivel mundial. Argentina podría comprarle a la India, Rumania o Canadá, pero sus precios aumentarán si acá no producimos”, denunció Lisse.

Coincidencias con Sapag

Para el diputado provincial del MPN Luis Sapag, presidente de la comisión de energía e hidrocarburos de la Legislatura, la salida es la puesta en marcha de la planta de fertilizantes. En diálogo con , también admitió negociaciones entre el gobierno provincial y el nacional. “La provincia está trabajando fuerte con Nación tratando de encontrar salidas”, aseguró.

Dijo que espera “que se vaya por el lado inteligente, salir de la coyuntura con la producción de al menos 300 toneladas para mantener las centrales que están funcionando y encontrar la forma para la inversión del orden de unos U$S 1.000 millones, a fin de reconvertirla en una planta de fertilizantes”.

En sintonía con lo charlado entre Aranguren y los dirigentes neuquinos, Sapag aseguró que “el principal candidato es YPF, que está expandiendo su cartera de negocios, produciendo electricidad y generando petroquímica en Bahía Blanca, asociada con la empresa Dow Chemical. Y si tiene negocios en Bahía Blanca, bien los podría tener acá, que es donde saca el gas que luego procesa allá”.

Sin embargo, fue crítico con la actitud del gobierno de Macri. “Esta es una tarea que si no nos movemos, el gobierno nacional no lo va a hacer, porque ellos están en el achique y este tipo de cosas le producen horror, se la pasan pensando qué carajo va a hacer el FMI”, expresó.

Tenemos que movilizarnos para apoyar a los trabajadores y profesionales de la PIAP para que este proyecto, que es un proyecto inteligente, porque el país lo necesita, se ponga en marcha. Tenemos que producir fertilizantes porque el principal insumo del fertilizante es el gas”, sentenció.

La propuesta de Podestá

Con el objetivo de reactivar y optimizar el funcionamiento de la Planta Industrial de Agua Pesada, el diputado provincial del Frente Grande Raúl Podestá presentó tres proyectos de ley para crear una “Comisión en Defensa de la Empresa Neuquina  de Servicios de Ingeniería (ENSI) Sociedad del Estado”, en la órbita  del  Poder Ejecutivo Provincial, un “Régimen de Promoción para la construcción de una planta de fertilizantes” y la creación de una “Empresa Provincial de Fertilizantes”.

Una de las propuestas, prevé la “Comisión en  Defensa de la ENSI” y buscará gestionar ante el Poder Ejecutivo Nacional los fondos necesarios para garantizar el pago de salarios y el mantenimiento PIAP hasta su reactivación. Además contempla incluir en el presupuesto nacional los recursos necesarios para la producción de 300 toneladas de agua pesada, orientadas a constituir el stock de vida útil de las centrales nucleares argentinas en operación y/o ventas en el mercado internacional spot. Desde esta comisión se promocionará una Planta de Fertilizantes anexada a la PIAP, que será operada por la Empresa Neuquina de Servicios de Ingeniería  ENSI S.E.

La Planta de Fertilizantes Neuquinos Sociedad del Estado “Plafer S.E.”, impulsada a través de otro proyecto de ley, se encontrará en la órbita del ministerio de Producción e Industria, proyectando su asociación con capitales privados y permitiendo diversificar y aumentar las exportaciones argentinas en la materia, creando también nuevos puestos de trabajo. La construcción de la misma permitirá a su vez mejorar los costos de producción del agua pesada que utilizan nuestras centrales nucleares.