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Columnistas
25/02/2024

Milongón

Milongón | VA CON FIRMA. Un plus sobre la información.
Fotografía: Soledad Cabrera

Cada lunes por la noche, en el Monumento a Evita, se reúne el Frente Tanguero Norpatagónico con clases de baile, espectáculo de canto y milonga. Es, dicen sus organizadores, “un espacio de resistencia, un lugar de militancia, de re-existencia”.

Gerardo Burton

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El Monumento a Evita en avenida Argentina es, desde enero, escenario de la Milonga de Necesidad y Urgencia, nacida al calor de las primeras protestas de artistas de varias disciplinas contra las medidas impulsadas por el gobierno de Javier Milei desde su asunción. La convocatoria, abierta a todo público, se mantendrá durante los lunes de febrero y marzo a partir de las 20.30 y está organizada por el Frente Tanguero Norpatagónico.

Lautaro Ríos Longobucco, conductor y productor de “La yerba de hoy”, programa que se emite por Radio Universidad CALF FM 103.7 -lunes a las 21 y sábados a las 19-, explicó que los encuentros tienen el mismo esquema: comienza con clases de baile de tango para principiantes, coordinadas por diferentes profesores, continúa un espectáculo de aproximadamente 40 minutos con músicos y cantantes -ya estuvieron Jorgelina Sotelo en canto acompañada por Ayelén Valdés; Rodolfo Velázquez en bandoneón y canto, y Del Río Tango, entre otros-, y finaliza con una milonga con tandas musicales grabadas para los asistentes.

Se trata, dijo Ríos Longobucco, de ofrecer un panorama del tango en la región al tiempo que se lo rescata como expresión cultural y artística nacional y popular, accesible para la mayoría de la gente. Los encuentros al aire libre se extenderán hasta finales de marzo, y, con el cambio de estación se proyecta llevarlos a bibliotecas populares, centros culturales y espacios cerrados. El objetivo, concluyó, es mantener la resistencia y la protesta contra las medidas que intenta imponer como políticas públicas el gobierno de Javier Milei en el país. El Frente Tanguero Norpatagónico -@frentetangueronorpatagonico en IG- incluye también a gente de Cipolletti que ha realizado encuentros similares en la Biblioteca Popular Bernardino Rivadavia de esa ciudad.

El decreto de necesidad y urgencia 70/24 y el proyecto de ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos del presidente Milei produjo un efecto cascada entre quienes desempeñan o ejercen actividades culturales en la provincia, y este frente de tango surgió como una expresión sectorial del más amplio Frente Cultural de la Norpatagonia, que el viernes 21 se movilizó a Casa de Gobierno y presentó un pedido de audiencia al gobernador Rolando Figueroa para discutir el “rumbo que tomará la provincia en políticas culturales”. El frente alude a “las graves dificultades que atraviesa el sector”, en especial a partir de la desjerarquización del área en el actual gabinete provincial. Solicitaron una reunión similar al intendente de Neuquén, Mariano Gaido.

Esta actividad de artistas y gestores culturales no está aislada de lo que ocurre en el país, sin embargo tiene aquí una característica especial dado el sólido componente de independencia que demostró este movimiento a lo largo de las décadas, incluso antes de la transformación de Neuquén de territorio en provincia.

En efecto, a partir asambleas numerosas con la participación de gente de las artes plásticas, del teatro, el cine, la danza, la literatura, la música, del arte callejero y performático, además de periodistas especializados en temas culturales, se formaron varios grupos y frentes dispuestos a resistir las medidas de desregulación total de la economía, de pulverización de conquistas gremiales y de supresión de presupuestos y organismos del área cultural. El proceso repitió una característica común, al menos en las provincias patagónicas: se establecieron redes horizontales, casi espontáneas, democráticas y con una unidad en la práctica que elude o pospone las diferencias ideológicas en función del objetivo principal de resistencia.

Estas asambleas comenzaron a realizarse en espacios públicos (plazas, el anfiteatro Gato Negro, el Parque Central, las plazoletas de avenida Argentina) casi contemporáneamente con el inicio del verano y eclosionaron en varios grupos o “colectivos”. Es una nueva modalidad de ocupación del espacio público que utiliza intervenciones artísticas, instalaciones y otras formas alternativas a las movilizaciones. La “milonga de necesidad y urgencia” tiene como objetivo, según un documento difundido esta semana, la defensa de la cultura nacional y popular, ya que “reunirnos es urgente y porque bailando encontramos nuevas formas de resistir 'la crueldad del fascismo que nos acecha'.”

El texto, difundido en el encuentro del 12 de este mes, puntualiza que “la hostilidad del contexto nos empujó a reunirnos en este Frente. Buscamos propiciar espacios para construir un tango social, popular, inclusivo, feminista. Sostenemos una práctica política y social basada en la defensa de nuestra identidad cultural. Nos abrazamos con otrxs para soportar la crisis y sobrevivir. Ocupamos el espacio público y esa decisión no es azarosa ni casual. El espacio público, las calles, las plazas son lugares de encuentro con otrxs, donde construimos otras formas de hacer política. El tango, también, es un espacio de resistencia, un lugar de militancia, de re-existencia. Queremos que el tango no sea elitista, ni excluyente o sectario, convencidxs de que todxs podemos bailar. Ponemos el cuerpo, disputamos y tensionamos sentidos, rompemos estereotipos desde un lugar de disfrute, del juego. Nos divertimos.”

Este último también es otro rasgo tanto de las asambleas como de los documentos y las acciones que se organizan, casi como recuerdo de aquello que decía Arturo Jauretche: “Nada grande se puede hacer con la tristeza... Nos quieren tristes para que nos sintamos vencidos y los pueblos deprimidos no vencen ni en la cancha de fútbol, ni en el laboratorio, ni en el ejemplo moral, ni en las disputas económicas… Por eso, venimos a combatir alegremente. Seguros de nuestro destino y sabiéndonos vencedores, a corto o a largo plazo”.

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(Fotografías: Soledad Cabrera)

 

Texto completo del documento del Frente Tanguero Norpatagónico

En el marco de los 40 años de democracia ininterrumpida de nuestro país y ante el avance de las políticas neoliberales del actual gobierno, que atentan contra los derechos conquistados por las luchas populares (de los organismos de DDHH, las organizaciones sociales, los feminismos, les trabajadorxs y los pueblos originarios), nos organizamos en un frente tanguero. Desde nuestro espacio comprendemos al Tango como una expresión artística y de resistencia que involucra la danza, la poesía y la música. Es una parte esencial de nuestra identidad cultural y un actor político de nuestra sociedad, ya que en su heterogeneidad conviven diversas expresiones y trayectorias políticas, clases sociales, generaciones, identidades de género, entre otras. El frente se compone por un grupo de personas vinculadas al Tango: bailamos, enseñamos, hacemos música, escribimos, musicalizamos, cantamos, investigamos y gestionamos milongas. Nos une la necesidad de defender nuestra cultura. Sabemos que, en esta crisis que nos atraviesa a todxs, nadie se salva solx, que la salida es encontrándonos, armando redes, realizando acciones que apuesten a lo colectivo, convencidxs de que en los abrazos también armamos nuestras rebeldías. Hacemos nuestra Milonga de Necesidad y Urgencia, porque reunirnos es urgente y porque bailando encontramos nuevas formas de resistir y alivianar con ternura, la crueldad del fascismo que nos acecha.

¿Por qué nos juntamos en un Frente Tanguero?

La hostilidad del contexto nos empujó a reunirnos en este Frente. Buscamos propiciar espacios para construir un tango social, popular, inclusivo, feminista. Sostenemos una práctica política y social basada en la defensa de nuestra identidad cultural. Nos abrazamos con otrxs para soportar la crisis y sobrevivir. Ocupamos el espacio público y esa decisión no es azarosa ni casual. El espacio público, las calles, las plazas son lugares de encuentro con otrxs, donde construimos otras formas de hacer política. El tango, también, es un espacio de resistencia, un lugar de militancia, de re-existencia. Queremos que el tango no sea elitista, ni excluyente o sectario, convencidxs de que todxs podemos bailar. Ponemos el cuerpo, disputamos y tensionamos sentidos, rompemos estereotipos desde un lugar de disfrute, del juego. Nos divertimos.

¿Cómo lo hacemos?

Con este horizonte, nos organizamos creando redes y articulaciones políticas mediante diálogos e intercambios de propuestas. Nuestra milonga de necesidad de urgencia, sin puertas ni ventanas, sin paredes ni barra, tiene los brazos abiertos para quienes se quieran sumar. Ponemos en marcha diferentes acciones artivistas para transformar la bronca y la queja en un modo de tango-protesta. Nuestra apuesta política se sintetiza en los siguientes puntos: somos parte del Frente Cultural Norpatagónico, accionamos intervenciones públicas que pretenden poner en evidencia la necesidad de políticas municipales, provinciales y nacionales que promuevan y defiendan la cultura y a sus hacedorxs/trabajadorxs, organizamos la Milonga de Necesidad y Urgencia cada lunes a las 20:30 hs en el Monumento a Eva Duarte de Perón (Neuquén Capital), proyectamos charlas y actividades para la difusión y formación sobre el tango comprendido como cultura popular, entre otras actividades.

(Neuquén, febrero de 2024).

29/07/2016

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