Tras anunciarse el pasado miércoles (14/06) que el peronismo y sus aliados participarán de los próximos comicios nacionales con la identidad electoral “Unión por la Patria” (UP), inmediatamente se suscitó el previsible debate acerca de las razones, pertinencia y valoraciones del cambio de nombre respecto de lo que, en los últimos cuatro años, fue -y todavía es- el “Frente de Todos”.

Un día después de ese anuncio, Cristina Kirchner volvió a ejercer su notable capacidad como pedagoga de masas: una líder que puede explicar al conjunto de la población grandes conceptos para abordar el futuro colectivo, asuntos complejos de la economía y la sociedad, ideas básicas de lo que debería hacerse desde los puestos de poder estatales para defender el bien común y los intereses generales del país, y exhortaciones para construir la fortaleza política necesaria a fin de conseguir los objetivos propuestos.

Como parte de su discurso pronunciado el jueves (15/06) en Río Gallegos, durante la inauguración del Hospital de Río Gallegos, la actual vicepresidenta de la Nación vinculó conceptos profundamente cívicos, éticos y emocionales, como la Patria y la familia, con temas crudamente económicos pero que constituyen la base material para desarrollar en los hechos nociones ideales (por ejemplo, justamente, Patria y familia).

Entre esos temas “crudos” se destacan el dólar como condicionante de la vida cotidiana del país y de todos sus habitantes, y asimismo la deuda impagable con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que contrajo, en un 100 por ciento, el gobierno oligárquico de Mauricio Macri.

Aclaración: esta columna de opinión prescindirá de analizar los aspectos del discurso vinculados con las disputas por candidaturas, las críticas (sin nombrarlo) al presidente Alberto Fernández y a su sector, la legítima indignación de la vicepresidenta hacia dirigentes de su propio espacio que amenazaron con acudir a la mafia judicial para resolver controversias electorales internas, y su denuncia -siempre solitaria, porque nadie nunca jamás aborda públicamente el tema, excepto sus abogados- respecto del “intento de asesinato” en su contra y la posterior “impunidadpara los que participaron, planificaron, borraron (pruebas)”.

Hecha esa salvedad, algunas de las expresiones más sustanciales que abordó Cristina Kirchner se reproducen y comentan brevemente a continuación:

“Postura única, patriótica, para eliminar la economía bimonetaria”.Al insistir con ese objetivo nacional que ella mencionó por primera vez públicamente durante la pandemia y así logró incorporarlo al debate público, dijo en su reciente discurso: “Si los argentinos, y por eso un poco esto de Unión por la Patria también, ¿no? Si los argentinos no advierten que cualquiera sea su ubicación política, ideológica, necesitamos imperiosamente un modelo que acabe con la economía bimonetaria y que además permita tener una postura única, uniforme, nacional, patriótica frente a los que nos exigen programas y ajuste.(...)

(Al Gobierno de Macri) “Le dieron los 45 mil millones de dólares para sacar los dólares que habían traído los fondos de inversión para hacer carry tradeen la Argentina a una tasa exorbitante que no podían ni ir, y entonces les pusieron todo el dinero y se produjo la fuga de dólares más vertiginosa y cuantiosa en apenas tres, cuatro meses, que se tenga memoria. (…).

“La (pistola) 45 en la cabeza” para firmar con el FMI, y “¡la escasez de dólares!”.La líder del kirchnerismo fue particularmente enfática en su exigencia de “decirle la verdad a la sociedad” respecto de la deuda con el Fondo Monetario Internacional, cuyo pago impide al país contar con los dólares que se necesitan para la industria, la innovación tecnológica y las exportaciones con valor agregado.

Lo dijo así: “Cuando el Fondo irrumpe en un país quiere marcar y, sobre todo cuando irrumpe después de un préstamo de la magnitud que le dieron a la Argentina, que compromete el 60 por ciento de la capacidad prestable del organismo. Entonces, esto no significa saltos al vacío, ni que no hay que pagarlo. No. Hay que decirle a la sociedad la verdad. Si tenés que firmar porque tenés la 45 en la cabeza, tenés que decirle que te hacen firmar. Porque después de todo, ese préstamo no lo adquirió este gobierno, no es responsabilidad de este gobierno. Lo sufre este gobierno y lo sufre la sociedad argentina. Pero creo que es hora de hablarle con la verdad a la sociedad y decirle la verdad. Si te pusieron la pistola en la cabeza, decile que te… pero no le digas que está todo solucionado, ya lo arreglé, está todo bajo control, déjenlo. ¡No es así!

“Porque entonces sobrevienen después las crisis de representación política y sobrevienen también esas propuestas de que vamos a quemar aquello, vamos a quemar lo otro, o vamos a reprimir.

“Tenemos que solucionar el problema de la falta de dólares en la Argentina, el problema que hoy tenemos es que no tenemos dólares. ¡Escasez de dólares! Y necesitamos dólares no solamente para pagar la deuda, privada y del Fondo, sino también dólares para sostener la industria, para invertir en Innovación y Tecnología, que es lo que nos va a permitir dar el salto cualitativo en materia de exportación y valor agregado. ¿Alguien cree que vamos a poder pagar esos préstamos únicamente exportando commodities? ¿En serio que lo creen?”.

“La escasez de dólares y el ajuste los va a sufrir esencialmente la clase media”.En una apelación a la comprensión de las clases medias, lo cual es ajeno al discurso tradicional del peronismo y solo raramente abordado por el kirchnerismo surgido de la experiencia de gobierno 2003-2015, esta vez Cristina le habló claramente a ese sector de la sociedad.

Esto expresó al respecto la vicepresidenta: “Es necesario que entendamos, y además, que fundamentalmente, como lo dije en Río Negro el 10 de marzo cuando fui a dar una clase magistral, la escasez de dólares y los ajustes los va a sufrir esencialmente la clase media, que es la que más dólares demanda en forma directa o indirecta. Esa clase media que puede, algunos sectores, darse el lujo de viajar al exterior o de hacer compras por tarjeta con cosas importadas… ¿A quién cree que le van a sacar ese nivel de consumo? ¿A quién? ¿Al que come polenta y arroz? ¡No, hermana, te lo van a dar a vos que hoy podés comprar cosas importadas! Y las cosas que consumís, insumos que también la clase media consume también en dólares porque son productos que demandan en su fabricación o en su importación dólares. Entonces, hablemos con claridad, no podemos dejarnos manejar únicamente por los videographs que se plantean y con frases grandilocuentes”. (…) (Nota del Redactor: el término “videografh” se refiere a los textos escritos en las pantallas televisivas, por lo general en las franjas horizontales inferiores de dichas pantallas y de uso permanente en los canales de noticias. Ese recurso visual de la TV es un potente formador de las creencias que se instalan en la opinión pública).

“La primera patria que uno tiene es la familia”, y el “terrible endeudamiento con el Fondo”.Hacia el final de su discurso, la ex presidenta de la Nación y actual vice relacionó magníficamente, aunque sin decirlo de forma explícita, las razones del nombre “Unión por la Patria” con la dimensión afectiva, emocional, humanamente cercana, de la idea de “Patria”. Y de inmediato volvió a vincular ese concepto con la dimensión económico-material, al reiterar la exhortación que ella viene realizando en los últimos meses acerca de la necesidad de un “diálogo entre todas las fuerzas políticas” para abordar la deuda con el FMI, que es “el principal problema” que tiene hoy la Argentina.

Así lo decía: “Creo que es necesario, (...) simplemente para que reflexionemos los argentinos, porque la situación es compleja, es difícil, y exige seriedad y responsabilidad de todos los actores. Oficialistas y opositores. Creo, sinceramente, que es necesario volver a ejercer ese amor por la patria, en todo caso, y si no les gusta la palabra patria porque suena muy grandilocuente, el hogar y la familia. Porque en definitiva la primera patria que uno tiene es la familia. Son tus hijos, son tus nietos, esa es la primera patria. La patria chica, la patria del corazón, la patria de la casa, la patria del hogar. Bueno, entonces es hora de que en nombre de tantas cosas, en nombre del derecho que tienen los jóvenes y que tienen nuestros nietos a vivir en un mundo mejor, es necesario que reflexionemos y, creo, que impulsemos concienzudamente y con responsabilidad que haya diálogo entre todas las fuerzas políticas para abordar el terrible tema del endeudamiento con el Fondo Monetario Internacional. Créanme que ese es hoy el principal problema que tiene la República Argentina”.

El peso simbólico de la nueva “UP”

Al reemplazarse la denominación de “Frente de Todos” por el de “Unión por la Patria” (UP), la discusión sobre el nombre fue y es unánime en todos los niveles del mundo político -principales referentes, dirigencias intermedias, militantes de base, etcétera-, así como en la ciudadanía en general, particularmente la que adhiere al peronismo y/o al kirchnerismo.

Por su parte, las cadenas mediáticas de derecha y los/las dirigentes de esa tendencia ideológica encontraron rápidamente la forma de desgastar y erosionar el peso simbólico de la nueva denominación, con el fin último de hacer propaganda política en contra de la coalición que encabezan los peronistas. Acudieron, para ello, a la falacia de que “el kirchnerismo quiere apropiarse” de la palabra “patria”.

En su discurso del jueves en Río Gallegos, la vicepresidenta volvió a explicar claramente cuáles son las tremendos desafíos y peligros económicos que enfrentan la Nación argentina y el pueblo en su conjunto: la “economía bimonetaria”, la “escasez de dólares” para impulsar el desarrollo y la deuda “terrible” heredada del macrismo.

Pero, tratando de contrarrestar la acción psicológica sobre la opinión pública que ejecuta la derecha a través de su poderoso aparato comunicacional, resaltó el profundo sentido afectivo del nombre de la naciente “UP”.

Fue un potente discurso que, además de muchos otros temas, incluyó esclarecedoras referencias acerca de la Patria, la familia, los dólares y el FMI: cuatro términos que no son en modo alguno una mezcla disparatada de asuntos ideales con otros crudamente materiales, sino todo lo contrario.

En una misma pieza retórica, Cristina Kirchner armonizó y mostró cómo las grandes y graves problemáticas de la economía nacional, y también de la política, influyen decisivamente en la vida personal, familiar, íntima y estrictamente cercana a la vida de cada uno/una de los argentinos y las argentinas.

(En la página web oficial de Cristina Fernández de Kirchner, se puede acceder al texto desgrabado y también al video del discurso pronunciado el jueves en Río Gallegos. El título de la nota es “Inauguración del Hospital de Río Gallegos. Discurso completo”).