Río Negro
13/10/2018

Jornadas de Justicia, Medios y Sociedad

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La ausencia de federalismo y sus consecuencias en la Patagonia fue parte de una charla debate desarrollada en Viedma. Uno de los integrantes del panel fue el periodista Omar Livigni. Contó algunas anécdotas de su paso por Clarín y las influencias del grupo monopólico y los condicionamientos al poder político.

Se desarrollaron en el Aula Magna de la Universidad Nacional de Río Negro (UNRN) las segundas jornadas de Justicia, Medios y Sociedad, organizadas por esa casa de altos estudios y el Poder Judicial.

Uno de los disertantes fue el periodista Omar Nelson Livigni, quien habló en el panel referido a la temática “Federalismo y centralismo en la percepción de la justicia”.

Se realizó un duro diagnóstico del federalismo o la falta del mismo en la historia del país. Livigni dijo que a su juicio lo del federalismo es sólo formal y que en la relación entre el poder central y la Patagonia siempre primó en los hechos un unitarismo.

Al hacer referencia a la relación de los medios con la sociedad, señaló también que hubo y hay una relación similar de desventaja entre los medios metropolitanos y los del interior, y en la relación medios-sociedad.

El hombre que fue por muchos años corresponsal del diario Clarín y autor de la primicia de ese medio cuando se anunció el traslado de la Capital Federal a Viedma, hizo referencia a la preeminencia de monopolios que atentan contra el pluralismo y una democracia real, mencionando como un caso emblemático al grupo Clarín.

Por haber trabajado precisamente en Clarín, pudo describir de primera mano cómo ese grupo, con la conducción del CEO Héctor Magnetto, supo condicionar siempre al poder político en función de sus propios intereses empresarios, los del establishment y el centralismo porteño. “No lo leí, lo viví”, aseveró.

Ejemplificó con el frustrado traslado de la Capital Federal a esta zona de Viedma, Carmen de Patagones y Guardia Mitre, que puso de modelo de un intento serio de avanzar a un federalismo real, y que a pocas horas del anuncio formal por parte del expresidente Raúl Alfonsín, escuchó en boca del propio Magnetto que “la capital no iba a ir a Viedma”.

Contó Livigni que “Magnetto me felicitó por la noticia, que había sido la primicia del año, pero con un tono hasta de confidencia me dijo, mire, le voy a decir una cosa, la capital no va a ir a Viedma. Sorprendido yo le dije, mire que el presidente lo anunció, y él respondió, no va a ir, usted limítese a mandar fotografías de lo que ve, no haga otra cosa”, explicitó.

En la charla se recordó en ese momento aquella frase de “puesto menor” adjudicada al conductor del diario porteño. Hace años se reveló una charla que habría mantenido el Ceo de Clarín con el ex presidente argentino Carlos Menem.

Se dice que ante algunas exigencias del Grupo al entonces presidente de la Nación, este en tono de broma le dijo "¿usted quiere ser presidente, entonces?". Y el gerente del multimedio le respondió "ese es un puesto menor".

En tal sentido el periodista reivindicó la Ley de Medios que impulsó y sancionó el gobierno anterior, y cómo, lamentablemente, se terminó imponiendo la estrategia de Magnetto de impedir la plena aplicación de la norma respecto a su grupo –el principal monopolio del país en materia de comunicaciones- a través de medidas cautelares, esperando la llegada de un gobierno de otro signo, como el actual, que desarticuló y dejó sin efecto en los hechos aquella legislación antimonopólica y que permitía una mayor pluralidad.

En materia de federalismo hizo un repaso de grandes proyectos que hubieran beneficiado a la Patagonia y que fueron frustrados por el ‘status quo’ del federalismo, sin dejar de mencionar además rigió que durante más de 70 años una “democracia restringida” ya que hasta la provincialización que puso en marcha el expresidente Juan Domingo Perón, los patagónicos sólo elegían presidente, pero no legisladores ni gobernadores.

Concluyó manifestando que “los factores de poder y los grupos de poder, afín al centralismo porteño y a los intereses económicos que giran sobre Buenos Aires y la Pampa Húmeda, frustraron el gran proyecto ferroviario patagónico que impulsó Ezequiel Ramos Mexía, al igual que las represas de Chocón-Cerros Colorados que prioritariamente iban a dar energía para el desarrollo patagónico, y terminaron dirigiendo la electricidad a los grandes centros urbanos metropolitanos”.

29/07/2016

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