El ministerio de Transporte de la Nación convocó a los intendentes rionegrinos de las ciudades que serán atravesadas por los viajes del proyectado tren Norpatagónico, a fin de mantener reuniones informativas. Las mismas se desarrollarán durante tres días en la sede de Trenes Argentinos, que es el organismo que realizó y realiza los estudios técnicos del operativo.

El proyecto de recuperación del tren de cargas comprende la transformación de 700 kilómetros de vías que se encuentran en mal estado, así como la implementación de nueva tecnología y obras de seguridad urbana. Se intervendrán los pasos a nivel y se sumarán barreras automáticas y cerramiento de vías, explicaron desde el ministerio.

Según se anticipó desde el ministerio conducido por Guillermo Dietrich, el nuevo servicio ferroviario permitirá reducir los costos para el desarrollo de las economías del norte de la Patagonia, y se convertirá en una opción logística competitiva, tanto para la producción que sale de la región como para la que ingresa.

En virtud de las quejas que hicieron conocer varios jefes comunales del Alto Valle pidiendo mayor información, detalles del impacto ambiental y garantía en los niveles de seguridad, ayer fueron convocados los intendentes de todas las ciudades y localidades por donde pasará el tren.

En tal sentido, recibieron la invitación los titulares de las comunas de Río Colorado, Choele Choel, Darwin, Coronel Belisle, Chimpay, Chichinales, Regina, Godoy, Ingeniero Huergo, Mainqué, Cervantes, General Roca, Fernández Oro, Cipolletti, Cinco Saltos, Contralmirante Cordero y Campo Grande.

También participarán de los encuentros Guillermo Fiad, presidente de Trenes Argentinos Infraestructura, junto al equipo técnico del proyecto del Ministerio de Transporte de la Nación; Andrés Barresi, secretario de Planificación de Río Negro, y el diputado nacional Sergio Wisky.

Infraestructura y empleo

El proyecto contempla una inversión estimada de 780 millones de dólares para intervenir 700 kilómetros de vías entre Bahía Blanca y Añelo, a través del sistema de participación público-privada (PPP), para impulsar el desarrollo de Vaca Muerta y la sustentabilidad energética, así como el crecimiento de las economías regionales de toda la traza con la reducción a la mitad de los costos logísticos.

Actualmente, la infraestructura de vía de la línea Roca se encuentra deteriorada, ya que no recibe inversiones significativas desde hace más de 40 años.

Las obras tienen un plazo estimado de 4 años, con lanzamiento de la licitación previsto para inicios del año próximo.