A cinco meses del fallo de la Corte que reconoce la preexistencia de la comunidad mapuche Catalán a la creación de Villa Pehuenia, los reclamos para que se reconozca el derecho de las comunidades sobre los territorios proliferan en la provincia. Aseguran que si se hubiera realizado el relevamiento de comunidades originarias previsto en la legislación nacional, este tipo de conflictos estarían resueltos.

"Mari Menuco es el reclamo oficial al gobierno para que termine el relevamiento territorial y ahí vamos a poner punto final a los conflictos con los vecinos, con los terratenientes y con las empresas", expresó el representante de la comunidad mapuche Gabriel Cherqui, en diálogo con .

Recientemente, la comunidad mapuche Kaxipayiñ bloqueó el ingreso a los propietarios del Club Mari Menuco porque para llegar hasta ahí se deben recorrer 800 metros de tierra pertenecientes a la comunidad.

Ante este conflicto, el Ministerio Público Fiscal convocó a una mesa de diálogo entre las partes que comenzó ayer y continuará el próximo martes. Pero los conflictos signados por el avance del gobierno provincial sobre los pueblos originarios están desperdigados por todo el territorio.

"Todas las concesiones que se entregaron dentro de territorios mapuche, como Villa Pehuenia, Mari Menuco o Vaca Muerta, se entregaron sin consenso de la comunidad. Esto va mucho más allá de la concesión en sí de la villa o del club", indicó el referente.

Explicó que en el caso del Club Mari Menuco, hasta hace poco tenían un acuerdo con el club sobre la ocupación de la tierra porque "nosotros confiamos en la Ley 26.160 que viene de alguna manera a delimitar el territorio actual, tradicional y público, y entonces nosotros decimos que este es nuestro territorio actual, es el tradicional y el público".

La Ley Nº 26.160 "de relevamiento territorial de comunidades indígenas" fue sancionada en 2006 y prorrogada tres veces. Ordena realizar un relevamiento técnico, jurídico y catastral de las Comunidades Indígenas y en caso de corresponder, de tierras ocupadas por las mismas de forma actual, tradicional y pública. El plazo de la última prórroga vence el próximo 26 de noviembre. Ese informe permitiría obtener la regularización dominial definitiva de los territorios que las comunidades ocupan tradicionalmente. Pero en la provincia está sin terminar y los conflictos territoriales se perpetran.

Cherqui dijo que el acuerdo con el Club Mari Menuco "se rompe en 2015 cuando el gobierno, en un acto totalmente impune, cuatro días antes de irse del gobierno Jorge Sapag entrega 360 hectáreas más a la Villa el Club Mari Menuco y no publica el decreto".

Agregó que los propietarios del club solamente tienen una tenencia precaria "y lograron entre comillas la propiedad de las 69 hectáreas antiguas que tenían, pero en esas 360 ellos pretenden desarrollar un proyecto de loteo infernal. Y nosotros decimos que no puede ser que cada gobernador que pase les dé de a 300 o 400 hectáreas y así nos van dejando sin territorios".

"Ni los crianceros ni los mapuche, que somos los pioneros, tienen título de propiedad. Y de pronto aparece un Jorge Sapag, descendiente de turcos, con 30 mil hectáreas de propiedad. Un Pablo Cervi, con 50 mil hectáreas", cuestionó Cherqui.

Aseguró que las disputas territoriales "siempre terminan en la Corte" porque "si alguien hace una denuncia acá siempre le cae a un fiscal o juez amigo, por lo tanto se apela. Cuando va a la Corte, por suerte, todavía no hay amigos de los funcionarios de Neuquén entonces actúa por derecho, no por amiguismo. Por derecho, la vamos a ganar siempre", aseguró.

Villa Pehuenia, Vaca Muerta y otros antecedentes

En la provincia hay muchos casos de avances sobre territorios que históricamente pertenecieron a comunidades mapuche. El caso emblemático es el de Villa Pehuenia y la comunidad Catalán, que llegó a la Corte Suprema y sentó un precedente jurídico muy importante para toda América Latina porque marca el rumbo para abordar este tipo de conflictos, en concordancia con los tratados internacionales.

El fallo de abril de este año dio lugar a una acción de inconstitucionalidad presentada por la Comunidad Mapuche Catalán y la Confederación Indígena Neuquina contra la Provincia del Neuquén, que había sido rechazada por el Tribunal Superior de Justicia.

Como informó entonces , el fallo reconoce la preexistencia de la comunidad mapuche en el territorio donde hace 17 años se creó el municipio de Villa Pehuenia. La Corte consideró que con el voto popular se le imponía a la comunidad una forma de organización política que le es ajena, toda vez que su modo de organización es a través de un sistema de asambleas familiares.

En consonancia con el dictamen que había emitido la Procuradora, condenó a la Provincia del Neuquén a que establezca una mesa de diálogo con las comunidades indígenas y la Confederación para que implementen la consulta omitida y diseñen mecanismos permanentes de comunicación y consulta para que los pueblos originarios puedan participar en la determinación de las políticas y decisiones municipales que los involucren.

Otro caso es el que involucra a la comunidad Pachil Antriao, en una disputa de un lote ubicado en el cerro Belvedere, en Villa la Angostura, con el ex basquetbolista Emanuel Ginóbili. Allí se lleva adelante actualmente una mediación, luego de haber acudido a la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Años antes, la provincia llegó a un acuerdo para relocalizar el istmo Mari Menuco - Los Barreales en el municipio de Villa El Chocón. Para ello, le transfirió 1.400 hectáreas de tierras fiscales con el fin de cerrar el conflicto que comenzó en 2014, con las comunidades mapuche Kaxipayiñ y Painemil por el derecho a los terrenos que se ubican en la zona de Vaca Muerta.

"Lo más emblemático es la entrega a espaldas de las comunidades, sin consulta previa, libre e informada, la concesión de Vaca Muerta", dijo Cherqui, y recordó que "el 70 por ciento de Vaca Muerta está dentro de territorio mapuche. Hay ahí nueve comunidades".