Apareció el libro “Desbordar el silencio, tejer complicidades. Acciones y voces del feminismo neuquino por el derecho al aborto”, de Julia Burton, publicado por la editorial Tren en Movimiento de Buenos Aires. El volumen, que lleva un prólogo de Ruth Zurbriggen, referente de la Colectiva Feminista La Revuelta, aborda las transformaciones sociales y culturales generadas desde el activismo feminista por el derecho al aborto en la ciudad de Neuquén. 

La autora se focaliza en aquellas acciones colectivas orientadas al cambio cultural en la sociedad neuquina, en especial en su lucha por subvertir los modos dominantes que utilizan los medios de comunicación, las instituciones, las organizaciones sociales y las personas para referirse al aborto, con lo cual también determinan las formas de sentir sobre el tema. Estas acciones del feminismo son, principalmente, los acompañamientos a mujeres que deciden abortar con medicamentos llevados adelante por la Colectiva Feminista La Revuelta (socorrismo) y la elaboración de un archivo de historia oral con testimonios de mujeres que abortaron desarrollado por Sin Cautivas – Feministas por la Resistencia.

En principio, Burton interroga -y se interroga- por las razones que la llevan a centrar su trabajo en Neuquén y no en un ámbito metropolitano. Es que en Neuquén, la práctica feminista desarrolló características propias que le permitieron producir teorías luego aceptadas y adoptadas en otras latitudes. 

Por eso el libro refiere la historia del feminismo y las luchas que debieron dar las distintas organizaciones a lo largo de las recientes décadas en una provincia y en una sociedad donde el conflicto se vive de manera cotidiana. También aborda la relación de las militantes feministas con los Encuentros Nacionales de Mujeres que, en sus recientes ediciones se convirtieron en Encuentros Plurinacionales de Mujeres, Lesbianas, Travestis, Trans y No Binaries, y las discusiones desarrolladas hacia el interior del movimiento.

La práctica militante también tiene su resultado en la pelea y obtención de legislación que avanza en la materialización de derechos para las mujeres: la interrupción legal del embarazo, el acompañamiento de los organismos de salud, la educación sexual integral, la ley de salud sexual y reproductiva, entre otras. La culminación fue, en 2018, lograr el tratamiento legislativo del proyecto de despenalización del aborto.

El libro aborda además los “sentidos políticos” del aborto que construyen las activistas feministas en su práctica. En las entrevistas, que constituyen otro punto de apoyo importante de este trabajo, se puede observar cómo las feministas consideran el aborto como una práctica más en la vida de las  mujeres. Las entrevistas con militantes feministas recopiladas son, entonces, un punto de partida para analizar las experiencias, impresiones, disputas y discusiones con sectores sociales  reacios a cualquier ampliación de derechos y las situaciones de violencia institucional.

Julia Burton nació en Neuquén en 1987. Es socióloga por la Universidad Nacional del Comahue, doctora en Sociología (IDAES/Universidad Nacional de San Martín) y becaria de investigación posdoctoral del Conicet por el Instituto Patagónico de Estudios de Humanidades y Ciencias Sociales. Integra la organización Socorristas en Red (feministas que abortamos). En 2018 fue una de las mujeres que expuso en la Cámara de Diputados de la Nación su posición respecto de la necesidad de aprobar el proyecto de ley de despenalización del aborto.

Fragmento de las “Conclusiones”: 

Desbordar el silencio. Tejer complicidades

Desbordar y tejer, como si fueran parte de un juego de palabras, son verbos que aluden a actividades tradicionalmente realizadas por mujeres. Desbordar en el sentido de deshacer una figura que ha sido bordada en otro momento, de desmontar una trama institucionalizada. Pero también, desbordar significa rebasar o sobrepasar ciertos límites, márgenes, fronteras, bordes. Ambos significados aparecen entrelazados cuando la militancia feminista “a la neuquina” desborda los silencios a los cuales ha sido confinado y condenado socialmente el aborto, desafía las tramas de la clandestinidad para desmontarlas, sobrepasa los márgenes de los modos dominantes de sentir y de referir respecto del aborto y los excede al elaborar sentidos políticos sobre esta práctica. Mientras desbordan estos límites, y (des)bordan las puntadas previas de la soledad, el silencio, la culpa y la vergüenza, las feministas neuquinas urden complicidades con las mujeres que las contactan para abortar, con aquellas que brindan testimonio sobre sus abortos, entre ellas como activistas y con otros sectores políticos de la ciudad de Neuquén. La trama resultante da cuenta de las alianzas que las feministas han establecido a lo largo de toda su trayectoria, las cuales funcionan como una red estratégica que hacen que no actúen en soledad. (Página 200)

editorial: www.trenenmovimiento.com.ar

NEUQUÉN, JULIO DE 2020