“No está en mis planes comprarme una mecedora para hamacarme mientras miro pasar la vida”. La ironía, pertenece a Horacio “Pechi” Quiroga y da cuenta de su decisión de jugar fuerte en las próximas elecciones municipales y seguir gravitando en la política neuquina más allá del 10 de diciembre próximo, cuando le toque retirarse de su cuarto período como intendente.

Quienes tratan de cerca al líder de Cambiemos en Neuquén aseguran que se apresta a resarcirse del revés sufrido en las últimas elecciones, en las que su performance quedó bien por debajo de sus expectativas, como resultado de la decisión del macrismo de ‘prestar’ votos al MPN para impedir que se forjara la idea de un kirchnerismo triunfante.

“‘Pechi’ sabe que en política siempre hay revancha y las elecciones municipales de Neuquén capital le pueden dar la oportunidad”, sintetizaron en su entorno.

En efecto, el jefe comunal de la ciudad que acumula más del 40% del padrón de la provincia, convocará en la semana entrante a la mesa de conducción de Cambiemos con al menos dos puntos trascedentes en agenda: candidaturas y fecha de elecciones.

“El planteo será claro, todo aquel que se quiera probar tendrá la oportunidad de hacerlo”, explicaron los estrategas municipales cuando se los indagó acerca de si habrá o no internas en Cambiemos.

La definición, por sí misma, entraña una devolución de gentilezas al gobierno nacional por la mala pasada del “voto útil”, que le restó a Quiroga no menos de 6 o 7 puntos en el resultado final de los comicios y lo dejó pedaleando en un cómodo tercer lugar, que no se ajusta del todo al reconocido capital político del cuatro veces intendente.

Es un secreto a voces que el candidato ‘in pectore’ del macrismo, el secretario de Coordinación Marcelo Bermúdez, no es el mismo que alienta Quiroga. Pero “Pechi” no les dará el gusto a sus aliados de la Casa Rosada, en lugar de pegar un portazo ha decidido mantenerse dentro de la coalición y jugar sus cartas en ella. “Si la gente quiere internas habrá internas y que sea la gente la que defina el candidato”, resumió uno de los suyos.

Aclaró, que en esa disputa interna Quiroga “no le va a cortar las patas a nadie” pero que eso sí, “tampoco será neutro”. E insinuó la posibilidad de que el actual intendente, a quien la Constitución le impide postularse este año para un nuevo período, encabece la lista de concejales suplentes, como forma no solo de traccionar votos para su propio candidato sino también de devolverle la pelota a Macri y sus muchachos.

Respecto de la  fecha de la convocatoria, Quiroga ya ha dicho que sería la misma de las elecciones nacionales, pero el tema también será objeto de debate en la reunión prevista para esta semana.

Aunque muchos especulan con la posibilidad de que apunte a una senaduría, quienes lo conocen de cerca sostienen que “Pechi” “nunca se aburrió tanto en su vida” como cuando le tocó ser diputado nacional. El líder del radicalismo neuquino tiene un perfil ejecutivo, y es de los que piensan que en una banca “no se decide nada”, entre otras cosas porque “nadie escucha” lo que dicen los diputados.

Por ahora, el jefe comunal neuquino está entretenido con la terminación de la batería de obras que tiene pensado inaugurar este año, el martes o tal vez el miércoles será el turno de Metrobús, cuyo corte de cintas, según confiesan sus hombres, fue postergado adrede por el gobierno nacional porque sabían que la suerte de “Pechi” en las elecciones del pasado 10 estaba echada.