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A los 1000 días de la “invasión rusa”, como les gusta llenarse la boca a todos los medios occidentales para designar la Operación Especial -con ello suponen que ya cumplieron transidos con ese estado de moralidad severa, ladeando la cabeza- se juntaron a cantar y tocar en Varsovia los tres cancilleres de los países satélites de los Estados Unidos más “importantes”, junto con el que quería hacerla de pianista, el canciller Sikorski, la quintaesencia europea de ése balbuceante occidente colectivo, el “mundo libre”, de valores “occidentales” que nunca aplican fuera de sus elites, el que ínfimos como Milei creen defender besando culos en Florida, ahora lloran por la flamante doctrina nuclear de dicho país, la que deberían agradecer porque únicamente le da mayor fundamento legal a las posibles respuestas militares que, a partir de ahora, si han de producirse, lo harán conforme a derecho y no producto de un pataleo o hartazgo del “paciencia-a prueba de balas” de “Putin”. Pero a Europa no le gusta la Doctrina, le cae mal que Rusia esté dispuesta a defenderse, aunque no se entiende como la doctrina volvería más peligrosa a Rusia, tal como se quejan. Entonces, pocas estrofas después de que el canciller francés abriera el compás en Polonia rogando por “derrotar la putinización del continente europeo” (sic), entraba la impresentable alemana Baerbock, la voz de RCA Víctor, con la estrofa “…el secuestro de niños y durante mil días… la gente ha estado desafiando el terror ruso que golpea sus hospitales sus guarderías…”. En este patético vals, los cancilleres polaco y británico hacían el estribillo: no aceptaremos una derrota de Ucrania, no, no, no, no lo haremos (se repite tres veces).
La “violinista” UE Von der Leyen, violadora (en tanto parte garante) contumaz de los acuerdos de Minsk en su periodo de ministra alemana y, en consecuencia, una de las responsables directas de la catástrofe en Europa, se unió al motete, indignada porque Rusia cortó el suministro de gas a Austria: “Putin extorsiona a Europa cortando el suministro de gas” (sic). Y, en estelar reaparición Angela Merkel, un poco la Madre Superiora de toda esta camándula europea sólo se limitó a tararear que varios presidentes y primeros ministros del centro y del este de Europa “deseaban que Rusia desapareciera”, rematando con el único fragmento rescatable, por gracioso, en todo este batifondo: “No puedo culparlos por ello, pero la realidad es que Rusia y su arsenal nuclear existen”.
Si tienen todavía paciencia para volver a otra pieza muestra del movimiento cacofónico contemporáneo, pueden consultar la sesión(2)en la guarida del Parlamento Europeo, donde ayer se multiplicaron las ovaciones por la aprobación del uso de misiles estadounidenses a destinos de Rusia y loas al usurpador Zelensky, que casi emocionado se habrá pensado como la destinataria de los fasos “Virginia Slim”: you’ve come a long way, baby... Las babas escurridas en esta reunión provocaron más de un resbalón.
El relato occidental “infantilizado”, carente de toda sustancia, ha sido detectado con claridad por el Coronel (RE) suizo Jacques Baud(1). En ese sentido, se concreta la estupidez en forma de acto en la sección americana de los satélites: el recontra mega lacayo Trudeau, a su vez, no quiere que se publiquen listas de nazis que viven apacibles libando miel de arce en Ontario o Manitoba, porque “eso beneficia la propaganda rusa contra Ucrania” (sick!). Así pues, the song remains the same. Esta opereta atonal no cambia y no cambiará jamás a menos que les desenchufen el equipo.
De manera que, todo sigue su curso… y pocas horas antes del anuncio neodoctrinal de Rusia, se produjo un ataque de Ucrania a Briansk con ATACMS (operados, necesariamente, por gringos), sin consecuencias. Dos días después, Kiev volvió a atacar con misiles británicos Storm Shadow instalaciones militares en Kursk y allí, tal como reconociera Putin, se produjeron en consecuencia varias bajas en el personal. Es decir, los chirolas ucronazis ya entraron de lleno a desafiar la doctrina. Las embajadas de las colonias europeas lo toman más en serio y están evacuando al personal en Kiev. Y se abrió entonces la temporada 2024-2025 de pruebas de tiro con misiles balístico y las FFAA de Rusia pusieron a prueba hoy 21/11 el temible Oreshnik, que impactó sitios estratégicos cerca de Dniepropetrovsk. Este juguete llega a los objetivos con velocidades de Mach 10 (entre 2,5 y 3 kilómetros por segundo); de manera que, como lo apuntó Putin hoy mismo, no hay defensa antiaérea que lo pueda detener.
Los nazionistas, la otra pata de los conflictos mundiales, repudiaron con vehemencia el fallo de la Corte Penal Internacional en contra del genocida BN porque es, para ellos, “antisemita” (sic). ¿De veras creerán que existe algún idiota que actualmente pueda tomar aquello en serio, sacando a Israel y algunos cuantos obnubilados de la “cole” en Buenos Aires?
Como reza un grafiti en la base de la estatua del poeta, destruida la semana pasada en Krivói Rog,
“Pushkin es eterno, pero no ustedes”
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