El sistema eléctrico del país tiene tres sectores: generadores, transportistas y distribuidores. Todo el sistema eléctrico es administrado por Cammesa. ¿Qué es Cammesa? Cammesa (Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA) es una empresa formada por el Estado nacional y representantes del sector privado. La compañía mixta administra las ventas y el precio de la energía eléctrica en todo el país. El secretario de Energía de la Nación designado por el presidente Milei es el presidente de Cammesa.

¿Cuáles son las generadores?

Las generadoras son las empresas que producen energía eléctrica. Es importante aclarar que la mayor parte de la energía eléctrica en nuestro país –un 55%- se produce en centrales térmicas utilizando gas. Las centrales hidroeléctricas generan un 25% de la electricidad del país, las nucleares el 7% y el 13 % restante es producido por parques eólicos o solares.

Pampa Energía es la empresa integrada de electricidad más grande de Argentina, debido a que participa en la generación, transmisión y distribución de electricidad. Su dueño es el empresario Marcelo Mindlin. Este año y por sexto año consecutivo, la compañía lideró el segmento de generación eléctrica en Argentina aportando casi el 15% del total país. Pampa Energía tiene nueve centrales térmicas entre ellas Loma de La Lata en Neuquén y Genelba en Buenos Aires que produce tanta energía como El Chocón, tres centrales hidroeléctricas y cinco parques eólicos. Además controla el transporte eléctrico y como si fuera poco también tiene pozos petroleros y gasíferos en Vaca Muerta.

Después de las privatizaciones de Carlos Menem -en la década de los ’90- muchas empresas generadores son extranjeras. Por ejemplo la mayor parte de las centrales hidroeléctricas de Neuquén: El Chocón-Arroyito es manejada por la italiana ENEL; Alicura está en manos de AES de Estados Unidos y la mexicana Orazul tiene la concesión de Cerros Colorados. Solo dos centrales están en manos de empresarios argentinos: Piedra del Águila controlada por Central Puerto y Pichi Picún Leufú por la ya mencionada Pampa Energía.

¿Cuál es la principal transportista?

Transeneres la empresa que realiza la operación y mantenimiento del 85% de la red de transmisión en alta tensión de Argentina y supervisa el 15% restante. Cobran por transportar la energía eléctrica a través de más de 22.000 km de líneas desde la provincia de Jujuy hasta Santa Cruz bien al sur y desde Neuquén hasta Misiones. Y quien es el principal dueño de Transener? Otra vez Marcelo Midlin de Pampa Energía.

¿Cuáles son las distribuidoras?

Las empresas distribuidoras son las que compran la energía eléctrica a las generadoras y transportistas -a través de Cammesa- y la distribuyen para que llegue a cada usuario. Las más importantes en el país son Edenor y Edesur. Edenores la mayor distribuidora eléctrica del país. Su concesión en el norte del área metropolitana de Buenos Aires incluye más de 3 millones de usuarios. Sus dueños son José Luis Manzano, Daniel Vila y Mauricio Filiberti.Vilas y Manzano son los dueños del grupo América, que reúne a América TV y la señal de noticias América 24. Edesures la distribuidora eléctrica en la zona sur y oeste del área metropolitana de Buenos Aires con más de 2,5 millones de usuarios. Está en manos de la empresa italiana ENEL –la misma de El Chocón- junto a un grupo de empresarios argentinos.

Por otra parte a lo largo y ancho del país hay cientos de empresas distribuidoras del servicio eléctrico. Algunas en manos del Estado como el EPEN en la provincia de Neuquén y otras privadas como Edersa en Río Negro. También hay 600 cooperativas distribuidoras de la energía eléctrica -en cientos de ciudades- como CALF en la ciudad de Neuquén.

El precio de las tarifas eléctricas para Edenor, Edesur y Edelap de La Plata las fija el gobierno nacional. Para las distribuidoras del resto del país el precio de las tarifas las fijan los gobiernos provinciales o municipales pero todas tienen que comprar la energía eléctrica a Cammesa al precio que fija el gobierno nacional.Si todas deben comprar la energía eléctrica al precio que fije el gobierno nacional.Y acá empiezael problema.

El tarifazo eléctrico

En febrero el gobierno de Milei -a través de la secretaria de Energía- decidió aumentar al doble el precio de la energía eléctrica que producen las empresas generadores. En ese momento el precio fijado que informó Cammesa pasó de $20 el kilo/watt/hora a $44; en junio a $57 y a partir de agosto a casi $60 el kilo/watt/hora es decir un 200% de aumento en seis meses. El gobierno nacional fija el mismo precio de generación de la energía eléctrica para todas las regiones del país y se actualiza de acuerdo al precio del dólar, porque las tarifas están dolarizadas.

Las empresas distribuidoras en cada provincia o ciudad -como el EPEN o CALF- solo pueden comprar a ese precio no importa que estemos al pie de las centrales hidroeléctricas. Y la energía eléctrica es el principal insumo de las distribuidoras que representa más del 50 por ciento de sus costos. Esta suba del 200% significó para todos los usuarios del EPEN o de CALF un aumento en las facturas que reciben mensualmente por sus consumos de electricidad. A eso hay que sumarle los costos operativos -insumos y personal- y los impuestos nacionales, provinciales y municipales.

Pero los aumentos en la factura son aún mayores al 200 por ciento. ¿Por que? Porque además se va eliminando el subsidio a la electricidad que teníamos los argentinos. Por ejemplo a partir de febrero el gobierno de LLA decidió eliminar la totalidad del subsidio al gas para los comerciantes, pequeñas y medianas industrias, hospitales, universidades, escuelas, instituciones y los usuarios residenciales de Nivel 1 de mayores ingresos. Por ese motivo estos sectores tuvieron aumentos descomunales en la factura de electricidad.

Y a partir de junio el gobierno nacional resolvió -además del aumento del precio de la energía que vende Camessa ya mencionado- sacar una parte importante de los subsidios a los usuarios de medianos y bajos ingresos –categorías N3 y N2- lo que significó un impresionante aumento de las facturas de electricidad de estos sectores.

Por este motivo las empresas distribuidoras provinciales de energía eléctrica de todo el país o las 600 cooperativas eléctricas que dan el servicio en 15 provincias tuvieron que aumentar las tarifas eléctricas de manera impresionante quedando al medio entre el gobierno nacional y los usuarios. Y aunque en cada provincia se diga “tenemos la electricidad más cara de todas” esto se da en todo el país de Jujuy a Tierra del Fuego y de Misiones a Neuquén.

Como si esto fuera poco, a partir de junio “clavaron” topes al consumo de electricidad de los usuarios de medianos y bajos ingresos por encima del cual –el consumo excedente- se paga como si el usuario fuera N1 es decir tuviera ingresos mensuales mayores a 3.600.000 pesos. Y los topes son muy bajos por ejemplo para aquellos hogares más humildes que no tienen redes de gas y se calefaccionan con electricidad. Y para los sectores medios por estos topes en el verano usar un aire acondicionado será un lujo…

¿Quienes ganan? ¿Quiénes pierden? ¿Y vos dónde estás?

Como consecuencia de estos aumentos descomunales en los precios de generación de energía eléctrica las pocas empresas que la producen tendrán exorbitantes ganancias a costa del bolsillo de los argentinos. Mientras que del lado del pueblo cada vez más los servicios como la electricidad, el gas, el agua y el transporte de colectivos representan un porcentaje más alto de los ingresos de los argentinos.

Los recursos energéticos que tiene nuestro país: gas, petróleo, combustibles, electricidad y litio se han convertido de la mano del gobierno de Milei en un botín para unos pocos y que además son los mismos enlos dos lados del mostrador: las empresas y el estado que ellos dicen detestar pero lo aprovechan para sus beneficios.

Un ejemplo: la secretaría de Energía de la Nación que es la que decide las tarifas del gas, el precio de la energía eléctrica que se genera y el valor de los combustibles, entre muchas otras cuestiones. La mayoría de los nuevos funcionarios de la secretaría de Energía puestos por Milei son ex gerentes de Techint de Paolo Rocca; ex directivos de Corporación América de Eduardo Eurnekiany de Pampa Energía de Marcelo Mindlin; y también ejecutivos que llegaron de los grupos Caputo y Central Puerto. Ellos junto a Milei son los responsables –entre tantos tarifazos- de los aumentos de las tarifas de electricidad.

Un puñado de empresarios maneja el Estado y las decisiones de las políticas energéticas del país. Para muestra basta un botón o tres botones: El nuevo presidente de la estatal YPF es Horacio Marín ex director de Tecpetrol del grupo Techint. Mario Vázquez exdirector de Mercado Libre de Marcos Galperín -el hombre más rico de la Argentina y adulador de Milei- también es director de YPF. El cordobés Carlos Bastos, responsable de las privatizaciones eléctricas y de gas durante el gobierno de Carlos Menen, también fue nombrado director de YPF. El diario La Nación publicó el 27 de abril que todos ellos junto a los otros 8 directores de YPF se fijaron un sueldo de 77 millones de pesos por mes en una empresa con mayoría del estado mientras despiden miles de trabajadores en todo el país…

Junto al sector financiero y los agroexportadores surge un nuevo poder en la Argentina: la casta energética cuyo único interés es exportar petróleo, gas, combustibles, electricidad, litio… no importa si los argentinos no podemos cargar nafta, o a las industrias y las universidades argentinas no pueden pagar la electricidad o vos no podes pagar la boleta de la luz o el gas para calefaccionar tu casa en invierno.

Estos empresarios son los que deciden la política energética del país y la vida cotidiana de los argentinos y sus empleados son los que están en el gobierno de Milei.

La energía en la era Milei. Tarifazo eléctrico a la velocidad de la luz. Un trabajo de David Lugones, Haydeé Ascúa y Cecilia Delloro que se emite por Radio Universidad-Calf 103.7 de la ciudad de Neuquén.