La abogada Natalia Salvo afirmó que la oposición en connivencia con el sistema judicial "están intentando medir fuerzas y terminar de mancillar la imagen pública de Cristina Kirchner" ante la proximidad de las elecciones de 2023, aunque consideró que "no dan los tiempos" para proscribir a la vicepresidenta de una eventual candidatura.

Tras el sobreseimiento de Mauricio Macri en la causa que lo investigaba por haber espiado a familiares del ARA San Juan, se mostró a favor del proyecto del oficialismo de ampliar la Corte Suprema de Justicia a 25 miembros. Amplió que "significa licuar el poder que tienen cuatro personas", dos de las cuales fueron puestas por decreto por el ex presidente Mauricio Macri y "hoy en día le procuran impunidad".

"Esta Corte de alguna forma también está inclinando y va a inclinar la balanza en favor del jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta", añadió, en diálogo con .

Salvo, que se desempeña como abogada y docente en la Universidad de Buenos Aires y en la Universidad Nacional de José C. Paz, consideró además que al principio de la gestión de Alberto Fernández "se desaprovechó un tiempo muy preciado" para disputar el poder a la justicia y que ahora es clave movilizar a la sociedad.

-Usted ha dicho que estamos en la última etapa del lawfare, que es la impunidad. ¿Puede explicar cómo funciona eso?

-Es como un cierre a lo que se inició en 2015, incluso con Milagro Sala en Jujuy, que es la persecución judicial de los dirigentes políticos, sociales e incluso gremiales, como estamos viendo ahora. Para finalizar este proceso de persecución judicial, los que lo llevaron a cabo precisan también de esa impunidad, que no es difícil de obtener porque la parte judicial que fue cómplice en esa persecución es la misma que va a propiciar esa cobertura impune. De alguna forma es lo que expuso la vicepresidenta en su video cuando habló de la complicidad del partido judicial. También está, por supuesto, el aspecto mediático. En este caso, lo que tiene que ver con los cuatro sobreseimientos de Mauricio Macri en quince días, en todo el pasaje de las causas que investigan el espionaje ilegal durante el macrismo a Comodoro Py, esa es la connivencia de amigos del poder judicial o del sistema de justicia para poder procurar la impunidad en los casos donde justamente se investigó o se puso en relieve que el macrismo espiaba ilegalmente.

-¿Qué relación ve entre estos sobreseimientos y la proximidad de las elecciones de 2023?

-Hay algunos que dicen que con la causa Vialidad se puede llegar a la proscripción de Cristina Fernández de Kirchner. Para mí no dan los tiempos. Primero, por los antecedentes de la Corte Suprema en el caso Menem, por ejemplo, que establece que cuando no hay una sentencia firme no se puede proscribir. Aún suponiendo que una sentencia de la Cámara Federal más una de la Cámara Electoral pueda ser así, creo que no dan los tiempos. Sí me parece que están intentando medir fuerzas en ese sentido y terminar de mancillar la imagen pública de Cristina Kirchner. Creo que a eso sí van a llegar, lo van a intentar y lo van a ejecutar.

-No cree que puedan evitar que, si ella quisiera ser candidata el año que viene, pueda hacerlo.

-No creo porque tampoco está claro que lo vaya a ser. Tienen ese as en la manga. El tiempo pasa a su vez.

-Si vemos lo que ocurrió en otros países de América Latina, en Brasil a Lula sí lograron encarcelarlo. ¿Cree que acá se podría dar un escenario similar?

-Lo intentaron en abril de 2016, en Comodoro Py, cuando le tomaron a Cristina siete indagatorias. Lo intentaron, digo, porque si no fuera por la movilización popular estaba todo el escenario para eso. Me parece que hoy el contexto es distinto. Lo que pasó tanto con Correa en Ecuador, como con Lula, donde efectivamente lo lograron, fue en otro tiempo latinoamericano. No digo que ahora sea bueno, pero con lo que sucedió en Chile, en Perú, en Colombia, no creo que vaya a tono. Sobre todo, con la complicidad mediática que ayuda muchísimo a esta situación. Aparte saben que llevar una acción de esas características realmente armaría un revuelo bastante importante.

-¿Cómo cree que se puede empezar a modificar este modo de funcionamiento de la Corte como un partido político? ¿Ampliar los miembros de la Corte, como propone el oficialismo, es una alternativa?

-Sí, sin lugar a dudas. Ampliar la Corte significa licuar el poder que tienen cuatro personas, dos de las cuales aceptaron ingresar por decreto (en referencia a Horacio Rosatti y a Carlos Rosenkrantz), una de las cuales fue vicepresidente y fuertemente vinculado a Macri y que además fue abogado de grupos económicos que hoy en día procuran esa impunidad. Sobre todo, porque hay un consenso muy grande por parte de gobernadores sabiendo que esta Corte de alguna forma también está inclinando y va a inclinar la balanza en favor del jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta. Entonces esa es una primera medida. Además hay algo que tiene que ver con decisiones políticas y con la interpelación de la sociedad que exija esa profunda reforma judicial.

-Lo cierto es que es difícil que ese proyecto se apruebe en el Congreso.

-Me parece que siempre entramos en la encerrona o el gobierno entra en la encerrona de la correlación de fuerzas. Cuando Néstor Kirchner, el día después de asumir, planteó el juicio político a la Corte, todos, incluso Alberto Fernández, le decían que no daban los votos. Lo cierto es que no dieron los votos para el juicio político pero muchos de ellos renunciaron y se destituyó a (Eduardo) Moliné O' Connor. Para decirlo en criollo, es una cuestión del huevo y la gallina. Hay que movilizar también a la sociedad porque es lo mismo que pasa con los grupos económicos concentrados. Si no, van a ganar por la misma iniciativa o co gobiernan.

-¿Le parece que falta iniciativa política para modificar a la justicia?

-Creo que se desaprovechó un tiempo muy preciado cuando se inició el gobierno de Alberto Fernández. La oposición había manifestado que no iba a ayudar a que saliera ningún proyecto pero me parece que sí, que se perdió mucho tiempo en ese aspecto. Incluso hubo opiniones en un consejo consultivo que eran vinculantes y no se llevaron a cabo. Ahora creo que las cosas están un poco más complicadas en esos términos.